"Más Allá de las Montañas"

Tras décadas de aislamiento autoimpuesto por sus dirigentes, el coloso chino y sus más de mil cuatrocientos millones de habitantes se han abierto al mundo de forma fulgurante, aunque a su manera, en los últimos 20 años.

Esta es la trama de "Más allá de las Montañas", una cinta de arte y ensayo que se adentra, con la cadencia del cine oriental, en la transición que afronta la sociedad china tras su apertura al mundo bajo el timón de Den Xiao Ping. La evolución de la historia de China a través de una de sus millones de historias personales. Una historia íntima que nos relata Jia Zhang Ke, afamado cineasta chino, premio al mejor guión en el Festival de Cannes. 

La historia de una mujer y dos amigos en un pequeño pueblo del interior de China en 1999, que se va separando porque las opciones del nuevo sistema son desigualmente aprovechadas por cada uno. Cada uno tiene sus aspiraciones y toma sus propias decisiones. Tan distinto de la vida monótona y sin expectativas en la época de Mao Zedong. Ejemplos contrapuestos como el del ambicioso Zhang Jinseng y el más conformista Liangzi. 

El trauma de una madre soltera con divorcio rápido como es el caso de Shen Tao, que elige al primero frente al segundo pretendiente. Para Zhang, Shen es rápidamente un vestigio del pasado. Para Liangzi, Shen fue siempre su amor platónico e inalcanzable. Podría ser una trilogía entre la China que rompe sus costuras, la propia China víctima de su propia evolución, y entre ambos esa China en transición. 

Pero no hay tres sin cuatro. Dólar, el hijo de Zhang y Shen es también el hijo de esa China que no reconoce su pasado y que aún no encuentra su lugar en el futuro. Tanto quiere  Zhang romper con su pasado que da a su hijo el nombre de la moneda del país que muchos chinos tanto admiran como modelo de referencia. Pero Dólar también debería representar a los millones de nuevos chinos que hoy transitan por todo el mundo aprendiendo otras culturas y aprendiendo a competir en un intento de recortar la distancia con Occidente y volver a su etapa de esplendor secular sólo interrumpida a partir de la época de Ilustración en Europa. 

A uno le queda la sensación de que China ha de reencontrarse consigo mismo, tras esta etapa de mimetización extrema con la cultura del éxito de Occidente que nos retrata la vida de Zhang y de la cual es víctima Dólar, "juguete roto" de la relación entre pasado y valores por la parte de su madre, a la que no casi no ve y cuyo idioma no habla, y ese futuro que su padre Zhang no es capaz de transmitirle en ese deseo de cambio total rompiendo puentes con el pasado.

Es una película que nos arroja preguntas e interrogantes, y en la que todas las sociedades que han estado cerradas pueden encontrar guiños reconocibles. Un deseo irrefrenable por lo que no se tiene que lleva a no valorar o incluso a despreciar los valores culturales propios. Las posibilidades individuales que ofrece el sistema capitalista y la desigualdad que genera el progreso. La importancia de la transición y definir un modelo de futuro que retenga lo mejor del pasado siendo parte del futuro. No cabe duda de que China está en esa parte del proceso y difícil será que pierda esa esencia diferencial de cultura milenaria que además se apoya en una etnia mayoritaria (Han). El orgullo de pertenencia a una cultura líder, las posibilidades aceleradas que les brinda la incorporación de su enorme mercado interior a la producción y al consumo, su fortaleza política posición de militar de liderazgo auguran un modelo de éxito si no se rompe el modelo social bajo el liderazgo político del Partido Comunista. 

"Más allá de las Montañas" es una primera incursión de China más allá de las fronteras sociales de su modelo en el siglo XX.