El Partido Demócrata inevitablemente cargó con la mayor parte del peso de la Guerra de Vietnam, con un Lyndon B. Johnson debilitado tras varios años en la Presidencia tras la muerte por asesinato de John F. Kennedy. La revolución de las ideas de los años 60 en un mundo configurado bipolarmente en torno a la Guerra Fría entre Rusia y los Estados Unidos. La polarización ya emergente en la sociedad americana, todavía remisa a la admisión de los negros, con la muerte en abril del 68 de Martin Luther King, y la emergencia de protestas radicales como los "Panteras Negras". Todos ellos caldos de cultivo que concluyeron en manifestaciones no autorizadas, conocidas por el Estado, y pese a todo llevadas adelante por los organizadores.
Cuando las ideas quieren manifestarse en democracia, es muy difícil retenerlas.
Este es el contexto, que la película falla en explicar suficientemente, para centrarse en lo que el título ya adelanta.
Fue el trasfondo del juicio y seguramente también la dinámica del desarrollo lo que fue un hito en la época. De una parte, el histrionismo y aparente parcialidad del juez Julius Hoffman. De otra parte, la enorme confrontación verbal entre el juez, los acusados y los abogados de la defensa. En la película, el fiscal del caso, el joven Richard Schultz asume un papel menos emocional aunque no menos efectivo, quirúrgico y preciso en su actuación. Resultó en condena para los acusados por varios delitos, entre ellos el traspasar las fronteras estatales para llevar ideas calificadas como subversivas al estado de Chicago (Illinois), donde tenía lugar la convención demócrata, pero buena parte de las condenas fueron por desacato al tribunal. El juicio acumuló 159 condenas por desacato al tribunal.
El momento histórico de la película refleja la intolerancia por la divergencia y el rechazo a ideas que pudieran ser calificadas como "izquierdistas". Los partidos alternantes en el gobiernos de los EEUU, republicanos y demócratas se han ocupado históricamente de borrar, y más en época de enfrentamiento con la URSS, cualquier pulsión socialista o pro soviética.
Es inevitable comparar el momento de entonces con la época política actual, con los dos grandes partidos y su electorado tremendamente polarizado, pero donde las ideas alternativas se mueven por otros medios, como las redes sociales, o incluso a través de presidentes antisistema como Trump. Y el debate de las ideas cada vez más pone contra las cuerdas a los sistemas políticos establecidos democráticamente, que ven cada vez más difícil contener el estado de derecho cuando las ideas no aceptan, o retan, el estado derecho vigente. Diríamos que las ideas quieren un nuevo derecho o se mueven más cómodas en el vasto campo del derecho natural frente al más estrecho edificio derecho normativo.
La película es de principio a fin la retransmisión del juicio y por tanto hay que evaluarla en el campo del debate entre las ideas y el estado de derecho y las leyes del momento. Es una película en clave de técnica judicial, deliciosamente interpretada por los protagonistas con detalles de inteligencia, ironía, flema, y confrontación continua que sin llegar a la violencia física, somete al espectador a una tensión de atención e interés que permanece durante las casi dos horas que dura la cinta.
Anecdóticamente, "The Trial of the Chicago 7" es otra de las víctimas del fenómeno Netflix. La película fue retransmitida de forma limitada en verano de 2020 en salas de cine, pero la pandemia Covid-19 ha hecho que los derechos de emisión caigan en manos de la plataforma de videostreaming.
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